Mallorca es un destino que invita al relax: playas de arena fina, aguas turquesas y paisajes impresionantes. Para saber dónde darse un chapuzón, aquí tiene una lista de las playas más bonitas.
Cala Mondrago: situada en el sur de la isla, esta playa es principalmente de arena, con algunas rocas aquí y allá.
Atraerá tanto a los amantes del sol como a los del submarinismo. Cala Agulla: esta playa del noreste de Mallorca está rodeada de un pequeño pinar. Su arena fina y dorada es ideal para jugar al vóley-playa. Tiene quinientos veinte metros de largo y unos cincuenta de ancho. Es Trenc: es una de las playas más famosas de Mallorca, de arena blanca y fina. Su paisaje de postal recuerda al Caribe. Está situada al sur de la isla, a quince minutos a pie del pueblo de Campos. Playa de Muro: También conocida por el nombre catalán de Platja de Muro, esta playa se encuentra en la costa norte de la isla, a unos sesenta kilómetros del aeropuerto internacional de Mallorca. Su profundidad es especialmente adecuada para familias con niños. Cala formentor: esta playa del norte de la isla tiene casi un kilómetro de longitud. Su principal atractivo son sus aguas turquesas, perfectas para el baño.
Canyamel: aunque la belleza de la playa de Canyamel atrae de inmediato, sus 290 metros de longitud y 80 metros de anchura pueden hacerle dudar. Pero no se preocupe: no hay masificación en esta tranquila localidad costera, ideal para familias con niños pequeños. Cala Millor: para los jóvenes que quieren disfrutar de una bonita playa mientras buscan un poco de diversión, esta estación balnearia es un destino de primer orden. Cala Mesquida: los surfistas no podrán resistirse a esta magnífica playita del noreste de la isla. Sus aguas cristalinas ofrecen grandes olas. Port d'Alcudia: nombrada hace unos años una de las playas más bonitas del mundo. La localidad costera es muy popular, mientras que los aficionados al submarinismo pueden aprovechar aquí las suaves corrientes. Puerto Pollensa: es una playa situada en la costa noreste de la isla de Mallorca, para los viajeros que se desenvuelven mejor con el español. Para llegar, hay que conducir unos seis kilómetros hacia el este desde la localidad interior del mismo nombre.